ARQUITECTURA MILITAR

SEGUIMIENTO ARQUEOLÓGICO DEL PROYECTO DE  CONSOLIDACIÓN  Y  LIMPIEZA  DE LA  TORRE Y EL LIENZO DE LA MURALLA  MEDIEVAL SITO EN LA CALLE BARRIO NUEVO- ESQUINA CALLE MIGUEL HERNÁNDEZ   DE  ORIHUELA.

RESUMEN DE LA ACTUACIÓN

Por  Emilio DIZ ARDID (Museo Arqueológico Comarcal de Orihuela)

Yacimiento: Murallas de la ciudad
Municipio: Orihuela
Comarca: Baix Segura
Provincia: Alicante
Tipo de yacimiento: Arquitectura Militar. Muralla
Cronología: Medieval islámico y medieval cristiano.


EQUIPO DE TRABAJO:
DIRECTOR: Emilio DIZ ARDID
CODIRECTOR: Jesús BOTELLA COIG
TRABAJOS DE CAMPO: Emilio DIZ ARDID, Jesús BOTELLA COIG y Djaphar SNACEL SÁNCHEZ
INVENTARIO DE MATERIALES Y DIBUJOS: Emilio DIZ ARDID y Juan MARTÍNEZ  BALDERO
TRANSCRIPCIÓN DE DOCUMENTOS: Susana NAVARRO CABRERA
PLANIMETRÍAS: Juan Antonio CASTRO SALA e Ismael PASTOR NAVARRO
FOTOGRAFÍAS: Emilio DIZ ARDID y Djaphar SNACEL SÁNCHEZ


RESUMEN

Mediante la presente actuación de seguimiento arqueológico se recogieron por una parte todos aquellos, aunque escasos, objetos muebles aparecidos durante los trabajos de consolidación de varias estructuras defensivas medievales, y por otra se documentaron mediante fotografías, planimetrías y alzados las estructuras mencionadas, utilizando la metodología de la arqueología de la arquitectura.
Los trabajos de limpieza y posterior documentación nos han permitido conocer e interpretar una de las torres esquineras de las murallas de Orihuela así como los lienzos con ella relacionados, situados junto a la antigua Puerta de Crevillente.
Los trabajos de campo se desarrollaron durante la segunda quincena del mes de febrero y la primera de marzo del presente año y corrieron a cargo del personal técnico del Museo Arqueológico Comarcal de Orihuela, así como alumnos en prácticas de  empresa tanto de delineación como de arqueología.

I. INTRODUCCIÓN
La presente actuación se ha realizado con motivo de la ejecución del “Proyecto de consolidación y limpieza de la torre y el lienzo de muralla medieval sito en la Calle Barrio Nuevo- esquina Calle Miguel Hernández”. Estos elementos arquitectónicos y su entorno se hallaban cubiertos de escombros y de vegetación tanto autóctona como alóctona (aloe vera y cactáceas) que enmascaraban totalmente el perfil de la torre. Por otra parte el lienzo de muralla presentaba añadidos constructivos, consecuencia de la habilitación de una pequeña cocina en el interior del lienzo.

Dado el mal estado de conservación que presentaban estos elementos patrimoniales se consideró desde la Concejalía de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Orihuela acometer una actuación de limpieza y consolidación, que vino acompañada de un seguimiento arqueológico de los trabajos.

La actuación arqueológica ha consistido en el seguimiento a pié de obra de los trabajos incluidos en el proyecto mencionado, a fin de recuperar los bienes muebles que pudiesen encontrarse, y en previsión de posibles afecciones al patrimonio inmueble. Además se ha aprovechado para documentar los distintos elementos arquitectónicos antes de su consolidación. Se trata de una actuación preventiva a fin de no dejar sin documentar aspectos de la fábrica de la torre y muralla que pudieran servirnos para una posterior restauración.

Aprovechando los andamios y las medidas de seguridad de la obra ha podido realizarse una amplia documentación fotográfica y planimétrica de todas las estructuras, que se ha completado con la consulta de la bibliografía existente y documentación de archivo.

II. AREA DE LA ACTUACIÓN ARQUEOLÓGICA

El área de la intervención comprende parte del  solar de la Calle Miguel Hernández 1, así como la medianera y traseras del inmueble de la Calle Barrio Nuevo, nº 45 y las zonas aledañas del Monte de San Miguel. Aquí estan incluidas la torre  y los dos  lienzos de muralla estudiados.

III. ANTECEDENTES ARQUEOLOGICOS Y DOCUMENTALES.

III.1. LAS MURALLAS DEL SECTOR SUR Y  ESTE DE LA CIUDAD. DATOS ARQUEOLÓGICOS.
El trazado de la muralla de época islámica no debió diferir sustancialmente del bajo medieval cristiano. Al enlazar éste con el de la alcazaba estaba condicionado forzosamente por las crestas del monte, y además por los barrancos existentes en los extremos de la ciudad, el río y la red de acequias. Así el muro partía de la alcazaba, transcurría por las crestas del Monte de San Miguel hasta la actual Calle Torreta, donde se conservan dos torres, desde allí se dirigía al río, donde se conserva la Torre de Embergoñes, a partir de ésta su trazado seguía paralelo al río y luego a la Acequia Vieja de Almoradí, donde se conserva otra torre, volviéndose otra vez hacia la alcazaba en las inmediaciones de la Calle Barrio Nuevo, al final de la cual se conserva una torre sobre la peña, motivo de esta actuación.

Entre los Principales restos conservados en el sector sur y este de las murallas documentados por la arqueología  hay que destacar:

Torre de los Roca. Situada en la actual Casa de la Juventud, a ella se accede desde la Calle Alfonso XIII, junto al Hotel Melia Tudemir. Torre cuadrangular de 6,80 m. de altura. Obra de tapial de mortero. Almohade.
Lienzo y  Torre Calle Barrio Nuevo. Situados en la peña al final de la Calle Barrio Nuevo e inicio de la Calle Miguel Hernández se conservan los lienzos de muralla y el cubo motivo de esta actuación, con una cronología, como veremos de época islàmica y bajomedieval cristiana. Siglos XII-XV.
Torre al final de la explanada del Seminario. Torre cuadrangular de 4,49 m. de altura. Obra de sillarejo con encadenado de sillería. Siglo XIV.
Lienzo y torre bajo el albacar. Lienzo de grandes dimensiones situado sobre el Seminario de San Miguel, obra de tapial y torre conservada hasta la altura de las almenas. Datado por R. AZUAR en época de taifas.

III.2. LAS MURALLAS DEL SECTOR ESTE DE LA CIUDAD. FUENTES  DOCUMENTALES EN TORNO A LA  PUERTA DE CREVILLENTE.
El trazado de las murallas, a levante de la ciudad queda claramente descrito por mossèn Pere Bellot al tratar de la defensa de la ciudad durante la Guerra de los dos Pedros :

“…Julián Rosell, desde la torre redonda hasta el Castillo; Fernando García Mena, desde la dicha torre hasta la puerta de Crevillente; Berenguer Morelles, desde allí hasta la torre de Navalflor, hoy campanario de la Merced; Guillem Castell, de allí al Postigo de San Salvador a las boqueras;” (BELLOT, P., 2001, Vol. 1, pág. 76)

Este trazado debía estar ya fijado probablemente, por lo menos en época almohade, pues la Puerta de Crevillente ya es citada en una carta de Alfonso X, fechada en Córdoba en fecha tan temprana como 1281, tan solo unos 15 años después de sofocada la rebelión mudejar por Jaume I :
…e el almodí de vender el pan e la farina  que sea en esta parroquia de San Saluador adelante encuentra la puerta de Crevillente…” (TORRES FONTES, J. 1973)

 Algunos años posterior es la cita del LLibre dels Repartimens, al repartirse solares durante la Sexta Partición  (1304-1314):
Aquestos son los solares. Primeramente, a Corberan Sanches en los solares de la porta de Creuillen de ues mig dia a tinent el huerto de los frates et del camin de Xacarella a la carrera de la barbacana, un solar.”  (TORRES FONTES, 1988, pp. 117)

La existencia  de una barbacana también está documentada en torno a las puertas de Murcia y de Elche. (DIZ, E. 1993, pp.174-175), sin duda por ser todos estos, los puntos más débiles de las defensas de la ciudad medieval.

Menos fiable es la referencia que hace a esta puerta Joseph Montesinos:
… Tenia (Orihuela) asi mismo dos portales, los mas principales entre otros, el uno que llaman la Puerta de Crevillente con dos torres que lo guardaban a los dos lados, y se dice que este portal lo fabricaba  el rey Moro de Murcia Abraham Alascandari, según lo expresaban ciertas Letras Arábigas que se hallaban en el mismo Portal, que interpretadas por un Moro de Argel (como dice el doctor Martínez Paterna, Libro I, folio 82) explico que significaba o decian: Este Portal mando fabricar el Rey Moro de Murcia llamado Abraham Alascandari, después que gano la Victoria al Rey Moro de Valencia (MONTESINOS, PÉREZ J., 1791,  Cap. 18)

Conocemos también algunos datos de este tramo de murallas relacionados con su demolición en el siglo XIX, gracias a un expediente municipal y gracias a  la prensa local.  Por esta documentación sabemos que en 1891 un torreón de sillería, situado entre la Calle de Arriba y la Calle barrio Nuevo amenazaba ruina, por lo cual los vecinos, dirigieron una instancia al Ayuntamiento para que lo demoliera o lo reparase, inspeccionado el lugar por el “alarife de la ciudad”, éste presupuestó las obras de demolición en 219 pts. (A.M.O., D-123, nº 12). Los trabajos debieron demorarse y los escombros en la calle se acumularon una temporada  hecho que queda recogido en la prensa local:

“En el extremo de la calle de Barrio-Nuevo, lindante con la calle de Arriba, se ha formado con los escombros procedentes de la demolicion de un antiguo torreon que se hallaba en mal estado, un monton de mas de tres metros de altura que incomunica por completo ambas calles causando no pocas molestias a los vecinos que para pasar de una calle a otra han de dar un gran rodeo ó aventurarse por aquella montaña de tierra movediza con peligro de su integridad personal.
Haciéndonos eco de las justas quejas del vecindario, esperamos que la comision de policía, de inmediatamente las ordenes oportunas (puesto que el derribo es por cuenta del Ayuntamiento,) para que aquellos escombros sean trasladados fuera de la ciudad, y cesen las molestias de los vecinos y transeuntes.”  (El Diario de Orihuela, Año VII, Núm. 1451, lunes, 6 de julio de 1891)

No podemos afirmar a ciencia cierta si se trataba de un torreón o bien el grosor y factura de sillería de  la obra confundió a los vecinos. Quizás se tratase de una torre que flanquease o en la cual se abriese la puerta de la muralla, la antigua Puerta de Crevillente. O más probablemente fuera parte del lienzo de sillería que aún se conserva y ahora hemos documentado, la puerta se abriría en el centro de la actual calle, desconociéndose del todo sus características arquitectónicas.

IV. ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LOS MATERIALES MUEBLES RECUPERADOS.

Únicamente se recuperaron materiales en dos unidades estratigráficas, de muy distinta índole.

En un mechinal de la obra de tapial (U.E.25), concretamente el b, recuperamos una muestra de madera, perteneciente a una aguja perdida.

El resto de materiales se recogió en la U.E. 16, estrato de tierra pardo oscura formado por el arrastre provocado por la escorrentía de las aguas de lluvia y por  los escombros y basura vertidos desde las casas vecinas. Debido a este origen, los materiales que contenía esta U.E. son muy heterogéneos y evidentemente no nos sirven para datar las estructuras medievales ni  siquiera un momento concreto de uso.

Podríamos subdividir los materiales en tres grupos:

Ibero-romanos: procedentes del yacimiento de San Miguel que se encuentra ubicado junto al Seminario Diocesano y laderas próximas.

Islámicos: entre los que están representadas algunas formas cerámicas como fragmentos de alcadafe y posiblemente también jarrita y/o redoma. Podrían proceder en parte de los rellenos de los tapiales de zonas próximas.
  
Útiles de los siglos XIX y XX: Se recogieron objetos de lo más  dispares como un fragmento de fuente cerámica, una azadilla y un bebedero de aves, que  sin duda habían sido arrojados al lugar una vez amortizados.

V. DESCRIPCION DE LOS HALLAZGOS INMUEBLES MÁS RELEVANTES E INTERPRETACIÓN

El seguimiento arqueológico de los trabajos de limpieza y consolidación de las estructuras medievales existentes en el lugar y su posterior estudio y documentación nos ha permitido aclarar algunos aspectos arquitectónicos y del trazado de este sector oriental de las murallas medievales de la ciudad de Orihuela.

Nos encontraríamos con una torre de planta cuadrangular que se asienta sobre la roca, de ella parten dos lienzos de muralla, uno hacia la ciudad que incluiría la Puerta de Crevillente y otro hacia el albacar.

El análisis de las correlaciones estratigráficas nos ha permitido diferenciar las siguientes fases constructivas en esta zona de la muralla:

Primitiva torre: sólo se conserva una pequeña porción del zócalo de mampostería (U.E. 28) sobre el cual se  superpone un paramento de tapial del que apenas quedan  54 cm. de altura y 115 cm. de anchura (U.E. 27)

2ª Torre: se superpone a los restos de la anterior, es obra de tapial de cal y canto, con un zócalo de  mampostería caliza, que se adapta a las irregularidades de la roca.
El  tapial se ha realizado con sucesivas tongadas de mortero y piedras de tamaño mediano, mediante la técnica de aguja perdida, apreciándose varios mechinales y un barzón.  La separación vertical entre mechinales es de unos 90 cm.
La zona de roca situada bajo la torre ha sido regularizada, a fin de mejorar la defensa, mediante la construcción de un muro de mampostería (U.E. 30) del cual casi sólo se conserva el relleno interior (U.E. 31).
La torre conserva parte de una escalera adosada a la roca, construida en   un habitáculo que aprovecha la pared rocosa trasera como cierre, o bien estuvo  embutida en el tapial de mortero. A través de esta escalera se accedería a una planta superior con otro habitáculo sobre el cual pudo existir un tercer habitáculo con accesos tanto al camino de ronda del lienzo superior  como  a  la coronación de la torre que suponemos almenada.
La altura del zócalo varía entre los 32 y 131 cm. y su longitud máxima apreciable es de 610 cm.
La altura conservada del paramento de tapial (U.E. 25), recayente a la calle Miguel Hernández, es de 107 cm y su longitud de 582 cm
Es de cronología islámica, presumiblemente almohade, con posibles restauraciones y remodelaciones posteriores

Lienzo de muralla superior (U.E. 32): Corresponde a parte del zócalo de mampostería. Únicamente se conservan 3 hiladas de piedras calizas cogidas con mortero de cal, se halla muy disgregado.  Longitud conservada 227 cm; altura apreciable de 8 a 52 cm;  anchura conservada 123 cm. De cronología islámica.

Lienzo de muralla inferior (U.E. 14): potente obra de sillería de piedra caliza bioclástica y arenisca con sillares cogidos con mortero de cal y arena y dispuestos a soga. Obra cristiana bajo medieval, que enlazaría con la Puerta de Crevillente, derruida parcialmente a finales del siglo XIX.
Tiene una longitud conservada de 296 cm, una altura máxima de 476 cm. y su anchura apreciable es de  134 cm.

Viviendas: dos viviendas  se fueron adosando tanto al paramento interno (Vivienda nº 1) como al externo de la muralla (Vienda nº 2). A finales del siglo XIX tenemos documentada la demolición de un torreón situado junto a la calle,  o quizás simplemente se trate de la muralla, liberándose un espacio sobre el cual se amplía la Vivienda Nº 2, mientras que desde la Vivienda Nº 1 se construye una pequeña cocina, en el interior del lienzo de muralla, posiblemente ya en el siglo XX.

Podemos concluir que la actuación ha sido de gran interés, pues nos ha permitido tener suficientes elementos para poder acometer, en un futuro, la restauración de la torre.


VI. VALORACIÓN DE LOS RESTOS APARECIDOS

Los restos aparecidos tienen un alto valor patrimonial. En virtud de la Disposición Adicional Segunda de la Ley 13/1985, de 25 de junio, del  Patrimonio Histórico Español y la Disposición Adicional Primera de la Ley 4/1998, de 11 de junio de la Generalitat Valenciana, del Patrimonio Cultural Valenciano, que hacen referencia al Decreto de 22 de abril de 1949, sobre protección de los Castillos de España, tanto la torre como el lienzo de muralla  deben considerarse Bienes de Interés Cultural.

VII. BIBLIOGRAFÍA

AZUAR, R. (1981) Castellología medieval alicantina. Área meridional, edita Instituto de Estudios Alicantinos, Alicante.

DIZ ARDID, E. (1993); “Espacios urbanos en la Orihuela Medieval”, en Urbanismo Medieval del País Valenciano, Ediciones Polifemo, Madrid, pp. 157-195.

FRANCO SÁNCHEZ, Francisco: Estudio de los Espacios Urbanos de la ciudad de Orihuela en el periodo islámico. (Tésis de Licenciatura, inédita) Universidad de Alicante 1987.

Llibre dels Repartimens dels terres entre vehins de la Molt Noble y Leal e Insigne ciutat de Oriola. Fets per los ssereníssims Reys de Arago cuant la conquista. Era 1310. Castella primer. Archivo de la Corona de Aragón, Sección códices

MONTESINOS PÉREZ DE ORUMBELA, Joseph: Compendio Histórico-Geográfico de la Fundación de la Antiquísima, Muy Noble, Muy Leal y Siempre Fidelísima Ciudad de Orihuela. Vol. I. Manuscrito propiedad de la Caja Rural Central Soc. Coop. Orihuela 1791.

OJEDA NIETO, J. (2007): La ciudad de Orihuela en la época de auge foral (siglos XVI-XVII), Cuadernos de Temas Oriolanos, nº 3, edita Concejalía de Cultura del Excmo.  Ayuntamiento de Orihuela.

TORRES FONTES, J (1973): Colección de Documentos para la historia de Murcia, III, Fueros y Privilegios de Alfonso X el Sabio al Reino de Murcia, edita Academia Alfonso X el Sabio, Murcia, pp. 162-163.

TORRES FONTES, J. (1988): Repartimiento de Orihuela, editan Academia Alfonso X el Sabio y Patronato “García Rogel”, Murcia.

TORRES FONTES, J. (2001): Anales de Orihuela, 2 vols., editan Real Academia Alfonso X el Sabio e Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, Murcia.



 Fig. 1.- Detalle del Cartulario de Orihuela. Puede apreciarse la Catedral y el sector oriental de las murallas, con la Puerta de Crevillente.
                                          Fig. 2. Torre después de su limpieza y consolidación.
                                           Fig. 3. Lienzo de muralla de sillería después de su consolidación
                                                      Fig. 4.-  Alzado frontal del torreón.-


                                             Fig. 5.- Alzado del lienzo de muralla de sillería (U.E. 14)


LA TORRE DE LA CALLE MIGUEL HERNÁNDEZ, Nº 1
(Artículo para la Revista Portada de Emilio Diz Ardid, Arqueólogo Municipal)


Entre la Calle Miguel Hernández y la Calle Barrio Nuevo, encaramados en la peña se localizan dos interesantes elementos arquitectónicos que formaron parte del recinto amurallado de la ciudad:

Un torreón de planta cuadrangular, obra de tapial de mortero de cal con zócalo de mampostería. Mide unos 10,50 m. de lado y de él se conservan varias estructuras escalonadas en la roca, la mayor de las cuales, la base del torreón, mide cerca de tres metros de altura. Hay que datarlo en época almahade (2ª ½ del siglo XII- 1ª ½ del siglo XIII).

Un fragmento de lienzo de muralla, con un espesor que debe estar en torno a los dos metros aunque sólo son apreciables 174 cm. al encontrarse parcialmente embutido en una vivienda.  Es obra de sillería de piedra caliza fosilífera cogida con  mortero de cal, distuesta en hiladas de entre 21 y 29 cm. de altura. El lienzo conservado mide 4,58 m. de altura por una anchura máxima de 2,95 m,  discurría entre el anterior torreón y la Puerta de Crevillente que se abría al final de la Calle Barrio Nuevo. Hay que datarlo en torno al siglo XIV-XV.

Actualmente la Concejalía de Turismo, Cultura y Patrimonio Histórico está realizando una intervención sobre estos vestigios de la muralla de nuestra ciudad, a fin de conservarlos y ponerlos en valor. Las actuaciones se centran en los siguientes aspectos:

Limpieza de toda una serie de vegetación invasiva como son aloes, chumberas y otras cactáceas, situada sobre los restos arquitectónicos y su entorno.

Consolidación de la torre y el lienzo de muralla por métodos químicos  (pulverización de silicato de etilo en los sillares y pulverización de agua de cal en el tapial) y físicos (rejuntado de sillares y mampuestos). Finalmente se procederá a la impermeabilización de la zona superior de la torre para evitar filtraciones del agua de lluvia.

Seguimiento arqueólogico de la obra, a fin de realizar planimetrías y alzados para  documentar aquellos elementos que puedan quedar enmascarados como consecuencia de los trabajos de consolidación.


El proyecto, actualmente en ejecución, está presupuestado en 16.398,46 €. Una vez concluido, está prevista una intervención desde  la Concejalía de Infraestructuras para construir una pequeña placeta en el lugar desde donde poder contemplar los restos arqueológicos.





                                                  CASTILLO DE ORIHUELA (B.I.C.)
                               
           
                                                   

                                                   


                                               TORRE VIGÍA DE CABO ROIG (B.I.C.)
                                                                   (Siglo XVI-XVII)


Se trata de una torre vigía, construida como tantas otras en el siglo XVI, para prevenir los ataques de los piratas berberiscos a nuestras costas. Es de forma cilíndrica y ataluzada en su base, sobre el talud se sitúa la puerta de acceso, así como numerosas ventanas de pequeño tamaño. Destaca en su interior la bóveda de ladrillos que separa la primera planta de la planta baja. Actualmente se usa como bodega del Bar-Restaurante Cabo Roig.

                                                          

                                                            

                            REFUGIOS ANTIAÉREOS:


                     LA DEFENSA PASIVA.  LOS REFUGIOS ANTIAÉREOS

El bombardeo sobre ciudades y sus poblaciones civiles adquirió carta de naturaleza como táctica militar en la Guerra Civil Española. Dada la superioridad aérea del bando nacional, durante la mayor parte de la contienda, la mayoría de estos bombardeos se produjeron sobre zona republicana, Guernica, Bilbao, Barcelona, Valencia, Cartagena, Almería, etc. 
Las autoridades republicanas a fin de proteger a la población crearon la Junta Central de Defensa Pasiva, de la que dependían las Juntas Provinciales y las Juntas Locales, cuya misión principal era proteger a la población de los bombardeos de la aviación franquista. Estas instituciones, junto con los ayuntamientos, se encargaron directamente de la construcción de refugios antiaéreos, editaron además una serie de folletos proporcionando las indicaciones técnicas necesarias para que los vecinos y asociaciones pudieran construir sus propios refugios. 



                  REFUGIOS ANTIAÉREOS EN ORIHUELA

En el caso de Orihuela el Consejo Municipal se encargó directamente de la construcción de los principales refugios, así en las Actas Municipales está atestiguada la construcción o demolición de varios refugios antiaéreos, entre ellos destacan:

El Refugio de la Plaza Ramón Sijé, excavado bajo la plaza y formado por cuatro galerías paralelas. (A.M.O.* B-60, Sesión Supletoria 7-I-1937)

El Refugio de la Calle Santa Justa, excavado en la roca caliza del Monte de San Miguel. (A.M.O. B-61, Sesión 28-IV-1938 y Sesiones de 23 y 28-II-1939

Refugio Antiaéreo del Túnel de San Francisco, excavado en la roca de Las Espeñetas, de considerables dimensiones, con capacidad para carros. (A.M.O. B- 60, Sesión Supletoria 7-I-1937)

 Refugio de la Plaza del Carmen. (A.M.O. B- 60, Sesión Supletoria 7-I-1937)

 Refugio de Jesús María.  (A.M.O. B-62, Sesión de 4-V-1940)

Refugio de San Sebastián. (A.M.O. B-62, Sesión de 4-V-1940)

Varios sótanos acondicionados como refugios. (A.M.O. B-60, Sesión Supletoria 10 de XII-36)




De estos refugios son tres los que se han conservado en relativo buen estado:

                 REFUGIO ANTIAÉREO DE LA PLAZA RAMÓN SIJÉ   
                                         (actual Plaza del Marqués de Rafal) 

Se inicia su construcción en diciembre de 1936, aunque posiblemente no se concluyó hasta junio de 1937. La obra se ciñe a uno de los modelos propuestos por la Junta de Defensa Pasiva, “refugio en galerías a poca profundidad”. Ocupa prácticamente toda la plaza y consta de cuatro galerías paralelas intercomunicadas, con accesos en dos esquinas de la plaza mediante escaleras. El techo no es abovedado sino que está formado por una losa de hormigón y vigas de hierro, tenía además una cubierta de obra que sobresalía más de un metro sobre el nivel de la plaza y que no se ha conservado, pues se retiró en abril de 1940.

                                                      

                           REFUGIO DEL TUNEL DE SAN FRANCISCO

Refugio excavado en la roca caliza del Cabezo de Las Espeñetas, realizado mediante la explosión de barrenos. Su construcción se inició en 1937. Lo conforma un único túnel de sección rectangular con las esquinas redondeadas. Mide unos 26 m de longitud, con una anchura entre 3,35 y 3,68 m y una altura entre 2,69 y 3,60 m.




                              EL REFUGIO DE LA CALLE SANTA JUSTA

DESCRIPCIÓN:

Consiste en un túnel de trazado sinuoso excavado en la roca. Tiene  entre 2 y 2,50 m. de altura y una anchura entre 1,50  y 3,60  m. Iniciaba su recorrido junto a la Calle Santa Justa, en el retén de la Policía Municipal, para después de unos 80 m. salir por la actual C/ Triana.
Toda la obra está excavada en la roca, apreciándose las marcas de los barrenos, solo la entrada y dos cuñas anti-metralla, situadas en sus proximidades, son obra de mampostería y cemento.  Junto a lo que fue antiguo retén, se conserva también una interesante bóveda de ladrillos algo peraltada, típica de este tipo de construcciones defensivas. Las actuales escaleras de acceso son obra moderna.
 Según referencias del antiguo capataz municipal de obras, la puerta original del refugio no sobresalía hacia la calle, como pasa actualmente, estaba situada sobre el muro en que se abre el túnel, por contra eran las escaleras las que invadían la calle. Fue el propio capataz quien dirigió las obras de construcción del tejadillo de la entrada, entrada que se cegó en los años 90 para acondicionar una hornacina alicatada, con una Virgen de Triana  pintada sobre azulejos. 








                ANTECEDENTES HISTÓRICOS Y ARQUEOLÓGICOS DEL INMUEBLE

El Consejo Municipal de Orihuela se encargó directamente de la construcción de los principales refugios durante la guerra Civil, entre ellos el de la Calle Santa Justa,  (A.M.O. B-61, Sesión 28-IV-1938 y Sesiones de 23 y 28-II-1939).
Fue uno de los últimos refugios en construirse, su obra fue acordada en Sesión del Consejo Municipal de 28 de abril de 1938.
Después de la guerra se usó como almacén municipal. Al construirse los Juzgados en los años 70 se cegó una de sus entradas. Siguió usándose como almacén hasta los años 90 del siglo pasado, fecha en que se clausuró la otra entrada para construir una hornacina que incluía un panel de azulejos con una representación de la “Virgen de la Esperanza de Triana”.
El 12 de enero de 2011 el Excmo. Ayuntamiento procedió a abrir de forma provisional el refugio, que llevaba prácticamente dos décadas cerrado. Se derribó el fondo de la hornacina y se procedió a la eliminación de los escombros y enseres que permanecían en el lugar tras sus años de uso como almacén.
Este mismo año de 2011 se restauró la escalera existente, se instaló iluminación, incluida la de emergencia, así como señalización de evacuación a fin de permitir el acceso al público, mediante visitas concertadas.
En 2013 se rehizo la escalera para facilitar el acceso al público, se cambió la puerta y se eliminaron los azulejos de la entrada, eliminando así todos los restos de la hornacina de los años 90.

VALORES PATRIMONIALES:

Estos  refugios antiaéreos tienen un doble valor patrimonial:

Material, en cuanto testimonio físico de un momento histórico concreto, la Guerra Civil Española.
Y simbólico, como testimonio del sufrimiento de la población civil en las contiendas bélicas y el esfuerzo del gobierno republicano por protegerla.
El Consell Valencià  de cultura y programas europeos como Landacapes of War, abogan por la conservación y puesta en valor de este tipo de patrimonio. El CVC ha propuesto su declaración como BIC (2004) o como BRL (2007 y 2011).